Mar 24, 2025 / 15:13

Urge frenar pérdida de manglares y selvas en Yucatán

Mérida, Yucatán.- Frenar la degradación ambiental en Yucatán es una necesidad urgente, advierten expertos en la materia.

Señalan que en los últimos años se han perdido miles de hectáreas de manglares y selva, lo que agrava el impacto de fenómenos naturales y afecta la biodiversidad.

La construcción de carreteras, la apertura de canales y la contaminación son los principales responsables de la destrucción de estos ecosistemas.

Eduardo Batllori Sampedro, investigador del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), alertó que la pérdida de manglares deja a la entidad más vulnerable ante huracanes y frentes fríos.

Estos ecosistemas actúan como barreras naturales, y su desaparición aumenta la fuerza con la que estos fenómenos impactan la región; además, su deterioro pone en riesgo especies migratorias y la actividad pesquera en la costa.

Datos de Global Forest Watch revelan que en los últimos 15 años se han perdido más de 16 mil hectáreas de manglares en Yucatán.

Zonas clave como Celestún, Río Lagartos, San Felipe y Dzilam de Bravo enfrentan una crisis ecológica que compromete su capacidad de regeneración.

La hipersalinización del suelo y la reducción de especies marinas afectan a comunidades locales.

José Luis Hernández, investigador del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY), advirtió que la deforestación por actividades agrícolas y ganaderas es otro factor crítico.

Señaló que la expansión urbana de Mérida está acelerando la desaparición de la selva baja y media, lo que contribuye al calentamiento local y a un mayor impacto del cambio climático.

Además, destacó que 14 por ciento de los gases de efecto invernadero provienen de la deforestación.

José Luis Hernández propuso un ordenamiento territorial adecuado y prácticas agrícolas sostenibles como soluciones urgentes.

Destacó la necesidad de establecer nuevas áreas de conservación y reducir la huella de carbono con el uso del transporte público y una menor dependencia de la carne en la dieta.

Si no se toman medidas inmediatas, la pérdida de manglares y selvas seguirá afectando la estabilidad ecológica y económica del estado.

La resiliencia de Yucatán ante el cambio climático se verá comprometida, poniendo en riesgo el futuro de las comunidades que dependen de estos ecosistemas.

Con información de: Luces Del Siglo

CD/AT

Únete a nuestro canal de Whatsapp y entérate de las noticias más relevantes del día, artículos de opinión, entretenimiento, tendencias y más.

Notas del día: