Boca del Río, Ver.- En Veracruz, en lo que va de este año, tres menores entre 10 y 14 años, han asesinado a otros tres niños; en dos de los casos los menores agresores están sujetos a proceso legal; en el tercero el menor infractor está prófugo de la justicia pues se lo llevaron sus padres.

La violencia y abusos que pueden sufrir en sus hogares, la ausencia de los padres, la exposición prolongada a tabletas, videojuegos y celulares, la desintegración familiar, la nula tolerancia y fácil frustración, son algunos de los factores que pueden llevar a los menores a actuar en forma violenta, al extremo de atentar contra la vida de otros menores, advierten especialistas de la Asociación Civil Yolohimiyotl, que desde hace varios años trabaja en la atención a menores, dando conferencia, talleres y asesorías a estudiantes.

Mireya Hernández Romero, directora general de la asociación civil Yolohimiyotl, señaló que tras las actividades realizan encuestas a los menores y más de un tercio de ellos reportan algún tipo de violencia.

El caso más reciente de infanticidio, es el de Javier Enrique de 4 años, asesinado en Córdoba por su hermanastro Daniel, la madrugada del 18 de septiembre en que con un arma punzo cortante, el adolescente de 14 años, le provocó una herida en el cuello; su padre Samuel está preso por tratar de borrar evidencias y encubrirlo.

El crimen causó consternación por el menor a quien los vecinos recuerdan como un niño feliz, “Ay era un amor, tenía cuatro añitos, era güerito y siempre a todo mundo saludaba, siempre buenos días, buenos días, era muy amistoso”.

Del menor que habría cometido el crimen, refieren “Casi no porque tenía poco tiempo de haber llegado acá, si lo conocíamos, pero muy poco, si tenía como dos meses de que había venido a vivir acá. ¿Cómo era él? Él era muy serio, un muchachito muy serio. ¿No daba problema? No, bajaba con el kilo también a comprar y luego se iban ellos dos, la mamá, el papá y se llevaban a ellos”.

El padre de Javier Enrique estaba a punto de lograr la custodia y recuperar a su hijo para criarlo junto con su hermanita mayor, de quien se hacía cargo, tras la separación de su esposa Briceyra.

Vecinos refirieron que el menor agresor estaba en terapia psicológica en Nanchital, donde antes vivía con su mamá, y que llegó a Córdoba a vivir con su padre para seguir su tratamiento.

Emilia Gabriela Naranjos Martínez, psicóloga de la asociación Yolohimiyotl AC refirió que “Pueden ser diferentes factores porque por ejemplo, puede ser el ambiente familiar y sería como una posibilidad porque no conocemos el contexto en el que este Niño vivía porque puede ser que haya sido violentado…Cuando el ambiente es violento se comienza a desarrollar de otra forma, entonces pueden desarrollarse acciones, que el niño por ejemplo tenga impulsividad, que no tenga auto control sobre sus acciones; otro motivo puede ser que el niño tuviera algo neurológico, un trastorno por déficit de atención, los niños con trastornos por déficit de atención también tienden a ser muy impulsivos a actuar sin pensar las cosas”.

Antes de este caso, el 21 de abril de 2023 en Tecolutla, Estefany Naomi de 13 años, fue asesinada por Víctor Yael de 14 años, su vecino y compañero de Secundaria; la familia del menor lo entregó a las autoridades después de bloqueos y manifestaciones de la población, que exigió justicia. Naomi fue apuñalada cuando iba en su bicicleta a entregar comida, en la calle miguel hidalgo del centro de ese municipio.

El domingo 15 de enero de 2023, en la localidad de El Tejocote, del municipio de La Perla, Samuel de 11 años fue asesinado a balazos por otro niño de 10 años, cuando jugaban a las maquinitas. El arma era del padre del niño agresor, quien tras lo sucedido tomó a sus hijos y se fue con su esposa. Toda la familia está prófuga de la justicia. En la casa donde operaban las maquinitas, solo quedaron los abuelos, compadres a su vez de los papás de Samuel.

Los crímenes de menores pueden prevenirse, si los mismos son atendidos adecuadamente, consideró Mireya Hernández Romero.

“En el proceso de adaptación en que se integra un nuevo miembro a la familia es importante que se viva un proceso y en este caso si era un niño, un adolescente que se encontraba en algún tipo de tratamiento era importante el que pudiesen mencionar al psicólogo o al terapeuta que lo estaba viendo, que iba a tener un cambio de vida, que iba a iniciar una nueva vida en una nueva familia, que se iba a integrar, que iba a haber una convivencia con nuevas personas que integraban su familia y como iba a hacer esta adaptabilidad es importante haber seguido este caso para poder hacer una adaptabilidad más adecuada tanto al niño como al entorno…Existe en este caso todo un sistema en el ámbito de la salud mental en la parte de la psicología, de la psiquiatría un procedimiento que debemos de seguir para que nuestros hijos, nuestras niñas, niños, adolescentes puedan adaptarse de una manera adecuada a sus nuevos entornos, porque no solamente cambian el ambiente familiar sino todo su entorno, nueva escuela, nuevos compañeros, nuevos parques, fútbol no sé, es todo un cambio todo un proceso que el adolescente en este caso al que se enfrenta y por lo tanto tener acompañamiento y Máximo si existía como lo han dicho en las distintas notas un procedimiento que él estaba viviendo en cuanto a terapias”.

CD/YC