Andan de entrones quieren ver como “masca la iguana”. Con la participación de más de 20 mil veracruzanos entre ellos algunos candidatos a diputados y al Senado de la República, este domingo se realizó la marcha de la Marea Rosa en una decena de municipios de la entidad.

Los contingentes mayores fueron los de la zona metropolitana Veracruz-Boca del Río y el de Xalapa con más de 5 mil asistentes en cada uno de ellos.

Quieren mostrar el músculo. En la capital del estado la marcha recorrió la Avenida Manuel Ávila Camacho hasta la plaza Lerdo en el centro de la capital veracruzana.

Allí, al terminar la concentración que encabezaron los candidatos a diputado y senadora Américo Zúñiga y Sara Ladrón de Guevara, del frente Fuerza y Corazón por Veracruz, un grupo de participantes se confrontaron con candidatos de Movimiento Ciudadano que daban conferencia en un café del centro.

Provocaciones. Increparon a la candidata a diputada federal por el distrito 10 de Xalapa, Ericka Blix de Movimiento Ciudadano, pero no pasó a mayores.

En Veracruz la manifestación inició en la Plaza de la Soberanía y recorrió el bulevar Manuel Ávila Camacho y bulevar Adolfo Ruiz Cortines hasta el monumento a los Niños Héroes.

Los participantes entonaron el himno nacional y a lo largo del recorrido gritaron consignas contra Morena y porras en favor de la candidata del PRI-PAN-PRD, Xóchitl Gálvez.

INE presente. Personal del Instituto Nacional Electoral llegó para verificar el evento considerado ya político.

En Córdoba el contingente cercano a las mil personas se concentró en el parque 21 de mayo frente al palacio municipal.

En el municipio vecino, Orizaba la marcha salió de la Alameda Cri-Cri hasta el parque Apolinar Castillo; eran también casi mil los participantes.

En Poza Rica se concentraron en el parque Juárez y en Tuxpan marcharon por el bulevar y llegaron a la explanada del Palacio Municipal.

***Vargas comenta que este domingo ocurrió el último debate entre Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez previo a las elecciones del próximo 2 de junio.

Los temas centrales fueron política social, inseguridad y crimen organizado; migración y política exterior; democracia, pluralismo y división de poderes.

Como en debates anteriores, el diálogo fue protagonizado por los choques y descalificaciones entre Gálvez y Sheinbaum, en tanto que Máynez incrementó esta vez sus ataques a la candidata de la coalición PRI-PAN-PRD.

La sede fue el Centro Cultural Universitario de Tlatelolco, el cual fue cobijado por cientos de simpatizantes de Morena que se dieron cita horas antes del arranque del debate y permanecieron ahí entre batucadas y bailes hasta el final del debate.

Sheinbaum aprovechó la referencia histórica del lugar para lanzar, en su primera intervención, el primer golpe a su contrincante: "Nos encontramos en Tlatelolco, donde ocurrió uno de los episodios más dolorosos de la historia de México, la represión del 2 de octubre, cuando un presidente priista ordenó la represión y el asesinato de jóvenes. 56 años después nos encontramos aquí, con el mismo “PRIAN”.

Lo lanzó con el tono de voz ecuánime que la ha caracterizado en otros debates y que sostuvo en este último, evitando también intercambiar miradas con Gálvez, incluso en los momentos más tensos entre ambas.

Por su parte, Gálvez llamó la atención por su participación menos enérgica, con pocas miradas hacia la cámara, incluso con expresiones de cansancio y menos sonriente que en otras ocasiones. Actitud opuesta a la de Máynez.

Gálvez aprovechó su tiempo para lanzar varios golpes a Sheinbaum que generaron reacciones en redes. La llamó "la candidata de las mentiras" y en varias ocasiones mostró un cartel que decía "Claudia miente". Pero también buscó reanimar la polémica al volver a llamarla "narcocandidata".

En se sentido, lanzó: "No es un apodo ni un insulto, es una descripción de hechos" y con ello referenció a un libro de la periodista Anabel Hernández, mismo que presentó en el debate, aunque eso no estuviera permitido.

"Los testigos protegidos que tienen a García Luna en la cárcel, ese que tanto critican, son los mismos que aseguran haber dado dinero al actual presidente para campañas políticas", dijo Gálvez. Añadió que en el último capítulo la escritora señala a Sheinbaum de recibir sobornos y droga.

Fue una de las pocas acusaciones a las que Sheinbaum replicó, descalificando las fuentes usadas por Hernández en su libro: "Yo creo que son mejores las del libro de 'La Reina del Sur', de Pérez-Reverte, o mejor le recomiendo ciencia ficción, o mejor leer Crónicas Marcianas", replicó.

El tema sobre la seguridad y el narcotráfico generó varios cruces entre los tres debatientes. Claudia defendió la estrategia de López Obrador en materia de seguridad, y aunque reconoció que los niveles en homicidios dolosos seguían siendo altos, defendió: "Lo importante es que empezó a disminuir".

No desaprovechó para afirmar en varias ocasiones que el problema de violencia se desató con el gobierno panista de Felipe Caderón. Señalamiento que también fue respaldado por Máynez.

Se le fue a la yugular. Otro momento polémico fue un señalamiento que le hizo Gálvez a Sheinbaum por haber usado la imagen de la Virgen de Guadalupe en una falda. "No tienes derecho a usar la religión de los mexicanos", le recriminó al señalar que ella no cree en Dios. La candidata de la 4T se limitó a decir que eso lo aclararía su equipo mañana.

El tema, además, no tenía un timing adecuado, pues surgió cuando el bloque estaba dedicado a la migración. Para el final del debate, la candidata de la coalición PAN-PRI-PRD se concentró en calificar el gobierno de López Obrador como "autoritario" y aseguró que sería el mismo camino que tomaría la ex jefa de gobierno capitalino.

En el bloque sobre la división de poderes, los tres hablaron de la necesidad de hacer una reforma al Poder Judicial, pero por parte de Xóchitl no desaprovechó el tema para lanzar críticas contra Arturo Zaldívar, al cual acusó de haber estado "al servicio del presidente".

Claudia devolvió el golpe acusando a la presidenta ministra de la Corte, Norma Piña de amagar a magistrados del tribunal electoral para reunirse "en lo oscurito" con Alito.

Para el final del debate, la candidata de la coalición PAN, PRI, PRD se concentró en calificar el gobierno de López Obrador como "autoritario" y aseguró que sería el mismo camino que tomaría la ex jefa de gobierno capitalino.

En ese tenor, Sheinbaum se centró en refutar esa narrativa. "El odio, la calumnia, no es democracia", replicó.

Esta semana en Veracruz se pronostica van arreciar los “golpes” mediáticos.

CD/YC