
Por la libertad de expresión
Leobardo Sánchez
“Hey, mira a esos bastardos muertos”
Para dar eficacia a un juicio de valor de una persona se debe ponderar o equilibrar las acciones por las que se le condena y por las que se le justifica su actuar.
En el caso específico del controvertido periodista Julian Assange CEO de Wikileaks que se le persigue por supuestos espionajes para extraer información clasificada. Se debe reflexionar sobre, ¿Qué es más grave?, cometer asesinatos de guerra que incluye niños, ciudadanos, periodistas; hacer quebrar bancos para favorecer a unas personas o publicar en la prensa mundial videos y documentos donde se demuestran estos hechos.
En el documental de Lindquist. B. y Hous. J. (2013) Wikileaks - Wikirebels the documentary narra,” El sitio Wikileaks ha publicado cerca de 400, 000 documentos clasificados, la filtración más grande de todos los tiempos (…) Wikileaks ha hecho pública la más extensa cantidad de información clasificada militar jamás vista, lo que han publicado está desafiando y provocando a gobiernos con “muertos en el closet” alrededor del mundo”.
En el importante documental se describen en vídeos, ataques a personas civiles en Irak junto con sus familias donde se ejecuta a menores de edad, periodistas y ciudadanos sin la más mínima consideración al ser humano.
Julian Assenge considera que los soldados norteamericanos matan como si estuvieran manejando un videojuego, quizá sea por una diversión macabra y además también lo hacen para alardear al llegar a su centro de comando y presumir cuántas personas han matado el día de hoy.
Para la prensa internacional, “Wikileaks se ha convertido en una fuerza global a tener en cuenta; puede no ser fácil de comprender al principio, pero la publicación de información clasificada es solo un pequeño paso en una batalla política e ideológica a largo plazo y la información clasificad filtrada es un arma y no un medio por sí misma”.
Hilary Clinton por su parte manifestó, en su momento, que las autoridades de Estados Unidos: “debemos condenar la publicación de cualquier tipo de información clasificada por parte de individuos y organizaciones”.
Denunciar crímenes de esa magnitud es obvio que incomodan a cualquier gobierno, pero el crimen está perpetrado y de no ser por esos periodistas investigadores expertos en informática; al delatar esas atrocidades cambian el rumbo de la historia al tratar de evitar repeticiones de esas crueldades.
Assange ha manifestado que el público tiene derecho a saber de estos materiales y el registro histórico deben tenerlos porque tiene significado diplomático, político, ético e histórico y, si algo trata de interferir con el descubrimiento de ese proceso se va a deshacer.
Desde 2006 Julian Assange y su grupo comenzaron a construir un servicio especial de internet: Wikileaks. org exclusivo para gente que quisieran “denunciar abusos de poder, sus compañeros de la conspiración, entre ellos hackers y matemáticos que se ubican alrededor del mundo y se comunican a través de una lista restringida de correo”.
Desde esta plataforma comienzan a definir sus pensamientos acerca de iniciar un movimiento global para publicar información clasificada en forma masiva.
Otro de los escándalos que publicó en 2007 Wikileaks, en asociación con el diario británico The Guardian es la evidencia sobre el expresidente de Kenia, Daniel Arap-Moi, malversando sumas de los fondos estatales. Tiempo después publicaron un reporte sobre el uso de “patrullas de la muerte” por parte de la policía de Kenia.
Esta publicación dejó en evidencia el sistema corrupto del gobierno de Kenia; siendo esta su peculiar forma de gobernar del mandatario donde se dio datos suficientes para descubrir el régimen, también, represor.
Daniel Domscheit – Berg del equipo de Assange ha dicho, “muchos países en el mundo de hoy ya no tienen leyes fuertes a favor de los medios de información, pero algunos, por ejemplo, Bélgica también los Estados Unidos con la primera enmienda y especialmente en Suecia se tiene fuertes leyes a los medios y al trabajo investigativo de periodistas”.
En la búsqueda de lugares en el mundo donde pueda desarrollar mejor su trabajo Assange ha estado en diferentes países europeos y los que le han dado cobijo han sido Suecia e Islandia, donde, incluso, ha influido para cambiar leyes que protejan más a la libertad de expresión; que es donde se ha refugiado para tener sus servidores y tener acceso a hurgar en diferentes partes del mundo buscando más información clasificado que de una u otra manera investiga información para publicar.
En la masacre publicada de Irak descrita párrafos arriba, se les suma la flagrante violación a los derechos humanos más elementales a los prisioneros de Guantánamo en Cuba. Ahí se dejan ver las vejaciones que reciben los detenidos acusados de terrorista.
“La batalla de Wikileaks contra la censura no tiene fronteras geográficas”. Otro de los escándalos de daño ecológico que publicó fue un reporte sobre por la corporación multinacional “Trafigura” que vertía desechos tóxicos en Costa de marfil lo que llevó a miles de personas a buscar atención medica”. En este proyecto contó con la colaboración del diario The Guardian.
En 2008 denunció las causas porque el banco más importante de Islandia colapsó; las causas, el favoritismo a inversionistas con la velada protección de funcionarios públicos.
A lo ancho de Europa Assange se ha hecho de un importante grupo de colaboradores entre los que destaca Kistinn Hrafnsson quien participó en el asunto del banco y relata, “Fui el primero en indagar sobre ese incidente, pero el banco reaccionó de una manera bastante interesante, habían emitido una orden judicial para silenciar a la televisión estatal, primero y único caso de nuestra historia”.
En el tema de los asesinados por el comando de Estados Unidos en Irak los tripulantes del helicóptero dijeron “Hey, mira a esos bastardos muertos”, al referirse al ataque a los niños y periodistas, dijeron, “ellos [los padres] tienen la culpa por traer a sus niños a una batalla”. ¿Cuál batalla?, sí es un asesinato a sangre fría.
Definitivamente la balanza de la justicia debe de ir a favor de Julian Assange, sin embargo, la consigna es matar al mensajero.
A la fecha Julian Assenge está en proceso de extradición de Reino Unido a Estados Unidos para ser enjuiciado por espionaje y traición, delitos por lo que podría alcanzar cadena perpetua.
CD/YC
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