- La reforma necesaria: FGE de Veracruz gana agilidad y rendición de cuentas

Bienvenidos a este servicio de barra. Hoy nuestro Martini se sirve con un Elixir de la Eficiencia, destilado directamente del Congreso de Veracruz, donde se ha dado un paso fundamental para modernizar y dinamizar el sistema de procuración de justicia: la aprobación de la reforma a la Fiscalía General del Estado (FGE).

Lejos de la retórica de la confrontación política, esta reforma debe ser entendida como un ajuste estratégico e indispensable para que la FGE, una pieza central del Estado, responda con mayor prontitud a las necesidades de justicia de los veracruzanos, y para que su gestión sea evaluable en tiempos razonables.

1. El Impacto Central: Periodos de Gestión Coherentes
   El principal cambio de la reforma es la reducción del periodo de gestión del Fiscal General de nueve a cuatro años. Este ajuste tiene un impacto positivo directo en la rendición de cuentas y la flexibilidad institucional:
   • Mayor Dinamismo: Un periodo de cuatro años obliga al titular a demostrar resultados efectivos en un plazo mucho más corto. Se eliminan las figuras eternas que se atrincheraban en la Fiscalía, volviéndola inamovible y, a menudo, ineficiente. La justicia debe ser dinámica, no estática.
   • Armonización Política: Al alinear la duración del encargo con la gestión sexenal, se facilita la coordinación total entre el Poder Ejecutivo y la FGE en las prioridades de seguridad y procuración de justicia. En un contexto de transformación profunda, esta sintonía es clave para lograr resultados inmediatos contra la impunidad.
   • Evaluación Constante: El nuevo periodo incentiva la evaluación periódica. Si un Fiscal está funcionando, puede ser ratificado. Si no, el Estado tiene la vía expedita para hacer los cambios necesarios, asegurando que la impunidad no se convierta en el sello de la Fiscalía.
2. El Refuerzo al Liderazgo Ejecutivo y la Realidad Social
   Otro cambio significativo es la modificación en el proceso de designación, permitiendo que la titular del Ejecutivo (la Gobernadora) envíe directamente las ternas al Congreso para la votación, y que estas deban ser avaladas por la mayoría de los ayuntamientos. Este mecanismo fortalece la rectoría del Gobierno en materia de seguridad y justicia, permitiendo proponer a los perfiles que mejor se adapten a la estrategia de seguridad estatal.
   Aquí radica un punto crucial:
   Es fundamental destacar que, más allá de los marcos legales de autonomía, la procuración de justicia sigue siendo percibida por la ciudadanía como una facultad esencial del Estado que debe responder a la autoridad central. Por ello, la persona que encabece la FGE debe trabajar en coordinación total y leal con la Gobernadora. La opinión pública no hace la sutil distinción de la autonomía funcional y, ante cualquier deficiencia o impunidad, la culpa recae directa e inmediatamente sobre el Poder Ejecutivo. Esta realidad social exige que la Fiscalía actúe como una aliada estratégica, asegurando que la estrategia de seguridad del gobierno se implemente sin fisuras ni pretextos.
3. La Justicia al Ritmo de la Transformación
   El impacto más importante es que, al reducir el tiempo de gestión, se acelera la responsabilidad. Quien asuma el cargo sabrá que su trabajo será evaluado con lupa y en el corto plazo, y que la única forma de perdurar será con resultados palpables en la reducción de la impunidad. El veracruzano requiere una Fiscalía ágil, responsable y coordinada. La justicia que se necesita en este momento de la transformación no puede esperar a que figuras atemporales terminen ciclos de nueve años.
   

El Cierre: Un Trago de Realismo Constructivo

Esta reforma es una muestra de que el Poder Legislativo de Veracruz está actuando con la audacia necesaria para armonizar las instituciones con el proyecto de transformación.

La pregunta que debe plantearse la ciudadanía es: ¿Es preferible una Fiscalía "autónoma" e inamovible que produce impunidad a una Fiscalía ágil y responsable, cuya gestión es constantemente evaluada por los poderes legalmente constituidos y se mantiene coordinada con la estrategia de paz estatal?
Sírvanse, con la convicción de que la agilidad en la gestión es sinónimo de cercanía con la justicia social.

CD/VC