RESULTA que este fin de semana el partido Morena definió a Rosa María Hernández Espejo como la virtual candidata que competirá por el Ayuntamiento más importante del estado de Veracruz en las elecciones del 1 de junio, el cual, a pesar de no ser la capital, política y económicamente es el de mayor relevancia.

La actual diputada federal se impuso en las encuestas internas que realizó el partido magenta para la definición de las candidatas y candidatos que aparecerán en la boleta electoral, lo cual ya estaba cantado, era de mero trámite, ya se vislumbraba, era pues, la candidata natural.

Y no es para menos, Rosa María Hernández Espejo, tiene amplia trayectoria en el partido y en la izquierda en general desde que inició su carrera política de la mano del ex presidente Andrés Manuel López Obrador; desde que incursionó en el servicio público en los años 90´s como regidora del PRD en la administración de Francisco Ávila Camberos, ha sido coherente con lo que dice y hace manteniendo sus principios e ideales.

Periodista y además académica, ha tenido una destacada carrera en los medios de comunicación radiofónicos y escritos. Es abogada, catedrática y, por si fuera poco, ganó al hilo dos elecciones consecutivas a la diputación federal por Veracruz, primero por el distrito IV en 2021 y el año pasado por el distrito XII, derrotando en las dos ocasiones a los representantes de la familia Yunes, quienes se han intentado perpetuar en el poder en la zona conurbada.

Todo parece indicar que esta no será la excepción. Rosa María Hernández Espejo es la favorita para volverles a ganar en la próxima elección, no sólo porque representa al partido que está de moda, si no por el trabajo ininterrumpido que viene realizando desde hace varios años en el municipio desde las diferentes trincheras en las que ha estado, ya sea en los medios, en el aula, en el Congreso, en las colonias.

RESALTA que, previo a su nombramiento el fin de semana, como la promotora de la Cuatro T en Veracruz, prácticamente todos los sectores habían cerrado filas en torno a ella. Después de la elección del año pasado, en la que compitió para la diputación federal junto a la presidenta Claudia Sheimbaum y a la gobernadora Rocío Nahle, se convirtió en automático en la virtual candidata a la alcaldía de Veracruz por los buenos resultados (por segunda ocasión) en las urnas.

Empresarios, políticos, industriales, inmobiliarios, constructores, comerciantes, etcétera comenzaron a buscar acercamientos con quien ya vislumbran como próxima alcaldesa del puerto de Veracruz. Y no solo por los resultados del pasado proceso electoral, sino porque entre los aspirantes, era la de mayor arraigo y de mayor trabajo y conocimiento como miembro de Morena.

El mismo viernes, la dirigencia nacional presumió a Rosa María como su próxima candidata a la alcaldía de Veracruz. Fue la propia Luisa María Alcalde quien se adelantó a la dirigencia estatal a dar a conocer públicamente el nombramiento, el cual ya no fue una sorpresa para nadie. Era ella.

Ayer, después de oficializado su nombramiento y destacando su altura política, hizo un llamado a la unidad a quienes también compitieron en el proceso interno para trabajar juntos a favor del partido y a favor del municipio, ya que eso es lo más importante. Dejó claro que en Morena están las puertas abiertas, pues caben todos.

No se esperaría menos de Anilú Ingram y José Ruiz Carmona, quienes como neo morenistas participaron en el proceso interno del partido. Han asegurado y han querido demostrar que tienen bien puesta la camiseta guinda y que, para ellos, hoy lo más importante es el bien del partido, del municipio y lejos están los intereses personales, ya que eso es comulgar verdaderamente con la ideología de la 4T, a la cual ahora pertenecen, despojándose de las prácticas priistas a las que pertenecieron por años.

CD/YC