Xalapa, Ver.- Anaís Palacios no descarta que familias que buscan desaparecidos en Veracruz, se desplacen hacia Jalisco al campo de exterminio de Teuchitlán, Jalisco, recién detectado para rastrear si hubiera restos de jóvenes veracruzanos entre los hallados en ese sitio por el colectivo de Buscadores Guerreros, de Jalisco.

Sin embargo, recomendó que “primero tienen que estar las autoridades por la validez que se le tiene que dar al hallazgo, qué ocurre cuando las familias descubren un lugar, elementos biológicos, osamentas, lo suben a redes sociales, y muchas veces esto tiene un impacto en la legalidad del caso, porque si otra persona ajena a la autorizada para legalizar eso, va, puede contaminar indicios, hemos visto prácticas que se llevan los elementos óseos del lugar, para demostrar que sí había, y los regresan, esto tiene un impacto en la legalidad”, afirmó.

El Estado debe resguardar restos óseos

Refirió que al Estado corresponde resguardar los restos óseos, más que a los colectivos, a las familias les toca ver que Gobierno del Estado haga su trabajo.

Anaís Palacios dijo que hasta este momento no hay información que de indicios sobre que pudiera haber restos de veracruzanos en las fosas y hornos de Teuchtitlán Jalisco.

“Hasta este momento no, creo que eso les explotó en las manos a todo mundo (en Jalisco) y no les dio tiempo ni de esconder ni nada; hasta ahora no tenemos, pero seguramente desde los colectivos y las asociaciones que trabajan en Jalisco, seguramente estarán compartiendo”.

Insistió lo que hacen a veces vulnera la legalidad del hallazgo; refirió que en los hallazgos de Veracruz, también han encontrado cartas de personas que desaparecieron en 2003, “ese horror gráfico de los zapatos, del crematorio en sí”, pero todavía no hay datos que vinculen al hallazgo de Jalisco, con víctimas de Veracruz en ese estado.

Puntos de Veracruz similares al de Jalisco

En Veracruz los puntos de fosas halladas que guardan similitudes con el de Teuchitlán, Jalisco, son el más reciente, del martes encontrado en Tihuatlán, el de Colinas de Santa Fe en Veracruz, en Alvarado, La Laguna, Arbolillo, y La Guapota; “no tenemos esa misma dinámica (detectada) de destrucción de cuerpos, que son las cocinas, pero vemos que hay ciertas conductas de grupos que van y depositan (cadáveres) en determinados lugares, pero los hay en Veracruz”.

Sobre Tlalixcoyan donde hallaron los cuerpos de jóvenes de Tierra Blanca, ya no hubo un seguimiento lamentó.

Añadió que cada vez se van acumulando más puntos, pero a veces reciben los puntos mucha publicidad y tras cinco años, los colectivos se preguntan qué pasó con esos restos humanos, ¿quién los está resguardando, procesando, a cuántos les han dado identidad?, expresó.

En Veracruz ademas hay lugares que no se han podido identificar explorar, porque son de difícil acceso, o hay temas de seguridad, “implican un montón de tiempo en procesar”.

No hay una cifra exacta de cuántos puntos hay sin explorar, pero son muchos.

Anaís Palacios afirmó que sí llevan acompañamiento de la Guardia Nacional; más que de la Secretaría de Seguridad Pública; porque han sido también de participar en desapariciones forzadas y no hay la confianza plena con ellos.

Actualmente cerca del 70-80 por ciento de desapariciones son no localizaciones, donde se orillan a jóvenes a ausentarse voluntariamente de su núcleo familiar. Ahí recriminan al Estado qué están haciendo para frenar las desapariciones de personas, puntualizó.

CD/YC