Tlacotalpan, Ver.- En Tlacotalpan hay un nombre que resuena con fuerza en calles, comunidades y hogares, Christian Romero Pérez, candidato a la presidencia municipal por la coalición Morena-Verde. Lejos de quedarse en discursos, Christian ha optado por la cercanía, recorriendo incansablemente cada rincón del municipio. No es casualidad que donde se para, se le suman vecinos, comerciantes, jóvenes y adultos mayores. Es una señal clara, el pueblo lo respalda.

A diferencia de campañas distantes o impersonales, Romero Pérez ha hecho del contacto directo su mejor estrategia. Escucha, anota, pregunta. En cada puerta que toca, en cada mano que estrecha, queda claro que no es un político improvisado, sino alguien que conoce las necesidades reales de Tlacotalpan y que ya ha demostrado capacidad durante su gestión anterior.

El respaldo que recibe no es gratuito ni fingido, es el reflejo de una administración que en su momento supo enfrentar retos como la pandemia y emergencias locales con responsabilidad y firmeza. Por eso hoy, más que una candidatura, Christian representa una continuidad con visión y compromiso.

Todo apunta a que este 1º de junio, Tlacotalpan tomará una decisión clara. Será un voto decidido por un proyecto con rostro humano, con historia y con rumbo. Tlacotalpan, dicen muchos ya, se va a pintar de Morena.

CD/GU