Al Olimpo de los dioses, el metalero Ozzy Osbourne, ‘Príncipe de las Tinieblas’

Estados Unidos.- El Príncipe de las Tinieblas dejó ayer su principado oscuro, y sus súbditos, que hace dos semanas le rindieron pleitesía en un lugar de Inglaterra, su terruño, lo adorarán ahora en un plano inmaterial.
Ozzy Osbourne, el líder del grupo de heavy metal Black Sabbath, murió ayer a los 76 años, anunció su familia en un comunicado, apenas unas semanas después de un épico concierto de despedida, donde en su última interpretación de Paranoid, su mayor éxito, el mítico roquero y su grupo Black Sabbath (Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward) se despidieron de los escenarios en un concierto en su Birmingham natal que rindió culto al heavy metal con acompañantes como Metallica, Guns N’ Roses, Pantera, Slayer, Tom Morello de Rage Against The Machine, Steven Tyler de Aerosmith o Ron Wood de los Rolling Stones.
“I love you (los amo)”, gritó esa noche con su voz todavía rechinante el carismático cantante a la entregada multitud en el estadio Villa Park, donde se rodeó de grandes estrellas del género.
Adiós crudo y emotivo
El músico inglés sufría desde hace varios años la enfermedad de Parkinson, que lo venció. Con más tristeza de la que pueden transmitir las meras palabras, les informamos de que nuestro querido Ozzy Osbourne falleció esta mañana (ayer), rezaba el comunicado.
Estaba con su familia y rodeado de amor. Pedimos a todos que respeten la nuestra privacidad en este momento, agregó la familia.
El cantante, que escribió su leyenda al morder la cabeza de un murciélago en pleno concierto, cantó en su despedida sentado, prisionero de sus temblores, en un trono satánico confeccionado para el padrino del heavy metal. Fue un adiós crudo y emotivo, acompañado de sus compañeros de Black Sabbath y de decenas de miles de seguidores del metal llegados del todo el mundo hasta el estadio del Aston Villa, convertido por una noche en una catedral pagana.
Auténtica leyenda
Ozzy fue uno de los pioneros del heavy metal –una rama del hard rock– y Black Sabbath cosechó un enorme éxito comercial en la década de 1970. El mundo de la música le rindió ayer homenaje. “Era un amigo muy querido y un gran pionero que se aseguró un lugar en el panteón de los dioses del rock –una auténtica leyenda”, escribió Elton John, que colaboró en la canción que da título al disco de Osbourne Ordinary Man.
Muy lejos de los excesos y escándalos que definieron sus días de gloria en la década de 1970, Ozzy, como todos lo llamaban, atrajo legiones de nuevos seguidores en los años 2000 como el abuelo con problemas de audición, un poco loco pero cariñoso, en el exitoso reality show de MTV The Osbournes. Hasta entonces, era conocido sólo por la hazaña del murciélago y por orinar en la copa de vino de un jefe de una discográfica y sobre el cenotafio de El Álamo en Texas.
Pero para los fanáticos del hard-rock, siempre será recordado como el líder de Black Sabbath, la banda que ayudó a lanzar el género del heavy metal, una mezcla de rock y blues impregnada de rebeldía y letras oscuras.
Black Sabbath tuvo un éxito inmediato desde el lanzamiento de su álbum debut homónimo en 1970.
Vida salvaje
Durante casi cinco décadas, cientos de miles de personas en todo el mundo siguieron congregándose para escuchar himnos del rock como Paranoid, Iron Man y War Pigs en los enérgicos shows en vivo de Black Sabbath, hasta que bajaron el telón con una presentación final en Birmingham en 2017.
Ozzy, como muchos de sus contemporáneos, sufrió lapsos de memoria debido a la bebida y las drogas. En 2010, científicos incluso analizaron su genoma para tratar de entender cómo había sobrevivido a tantos excesos.
Ozzy no recordaba dónde había interpretado por primera vez el álbum debut de Black Sabbath, pero sí la reacción del público. Todas las chicas salieron del lugar gritando, dijo en su autobiografía Yo soy Ozzy. Su estilo de vida salvaje lo llevó a choques con la ley, incluidas visitas a la corte por cargos de satanismo e incitación al suicidio. Pero su carrera delictiva comenzó temprano: estuvo preso por robar un televisor y ropa de bebé.
John Michael Osbourne nació en una familia trabajadora en Birmingham el 3 de diciembre de 1948 y se ganó su apodo en la escuela primaria. Disléxico y harto de las tareas, abandonó la escuela a los 15 años antes de trabajar en empleos manuales, incluso uno en un matadero. Pero ya había decidido que se convertiría en una estrella de rock tras escuchar a los Beatles en la radio, una fantasía que cumplió increíblemente rápido.
Poco después de conocer al guitarrista Tony Iommi, ambos decidieron dejar de hacer blues y escribir música aterradora, inspirados por películas de terror. El sonido de pesados riffs acompañados por la voz monótona de Ozzy cantando letras que exploran el lado oscuro de la naturaleza humana pronto se convirtió en la plantilla del heavy metal. Pink Floyd era música para chicos ricos de universidad, y nosotros éramos exactamente lo opuesto a eso, afirmó.
Los álbumes fueron apareciendo a un ritmo frenético, a menudo rechazados por los críticos pero aclamados por los seguidores. Ozzy dejó la banda en 1979 para continuar una exitosa carrera en solitario, con hits como Crazy Train, Mr. Crowley y Mamma, I’ Coming Home, mientras lidiaba con una turbulenta vida personal.
Su primer matrimonio con Thelma, con quien tuvo dos hijos, Elliot y Jessica, fue, según él mismo admitió, un desastre. En 1982 se casó con Sharon, su mánager, quien rápidamente se convirtió en su apoyo. Tuvieron tres hijos: Aimee, Kelly y Jack, y adoptaron a otro, Roberto.
A pesar de su personalidad aparentemente despreocupada, las muertes de sus amigos roqueros Lemmy Kilmister, de Motorhead, y David Bowie lo sumieron en un estado reflexivo. Todos están muriendo a mi alrededor, declaró a la revista Rolling Stone en 2016.
Fue diagnosticado con Parkinson en 2019, y todas las ganancias de su concierto del 5 de julio se destinaron a organizaciones benéficas como Cure Parkinson’s y el Hospital Infantil de Birmingham. Pero El Príncipe de las Tinieblas se aferró a la vida durante otros seis años antes de unirse a sus compañeros en el panteón de los grandes músicos británicos. Es la última canción. Su apoyo nos ha permitido llevar un estilo de vida increíble (…) Gracias desde el fondo de nuestros corazones, mencionó Osbourne al público tras terminar su actuación con Paranoid.
Con información de: La Jornada
CD/AT
Notas del día:
Jul 23, 2025 / 18:46
Fiestas de Santa Ana aumentan expectativas turísticas en Veracruz
Jul 23, 2025 / 18:41
Anuncian la Copa de Natación “Nuevas Promesas 2025”
Jul 23, 2025 / 18:38
Gobernadora Rocío Nahle sostiene encuentro con alcaldes electos del PRI
Jul 23, 2025 / 18:13
Atiende diputado Esteban Bautista a la ciudadanía veracruzana
Jul 23, 2025 / 17:13
Cae en Jalisco “El Pinto”, uno de los líderes de La Barredora en Tabasco
Jul 23, 2025 / 17:01
Le salió caro el viaje en Didi moto; muere en accidente
Jul 23, 2025 / 16:43
Coatzacoalcos refuerza lucha contra el dengue y reduce casos
Jul 23, 2025 / 16:40
Se afianza nuevo modelo educativo de la 4T, asegura la SEP
Jul 23, 2025 / 16:36
Atienden fuerzas de tarea accidente de cuatrimoto en arroyo de Coscomatepec
Jul 23, 2025 / 16:11
Apagones no son por falta de mantenimiento, dice CFE; invertirían 40 millones de dólares
Jul 23, 2025 / 16:10
La asaltan y le quitan su pensión del Bienestar en Xalapa
Jul 23, 2025 / 16:00