l invencible verano de Liliana, el libro de la mexicana Cristina Rivera Garza, fue galardonado este viernes con el premio Rodolfo Walsh, el más veterano de los galardones de tema criminal de no ficción escrita en español de la Semana Negra, el festival de novela policiaca y negra de este puerto asturiano en su edición trigésima quinta.

El jurado –integrado por Pepe Gálvez, Marifé Antuña, José Luis Argüelles y Pablo Batalla— acordó por unanimidad conceder el galardón.

“Tras un debate animado con aprecio singular a la calidad de otras dos de las obras finalistas”, por considerar que El invencible verano es “una obra de la que valoramos como sus más destacables méritos la construcción psicológica minuciosa de la protagonista, hermana asesinada de la autora, a partir de una exhaustiva documentación, ordenada mediante una arquitectura literaria original, moderna y conmovedora, capaz de lograr la alquimia de trasladar al lector el fresco objetivo de una realidad acuciante de las dos orillas del Atlántico –la barbarie del feminicidio —a partir de una fortísima implicación subjetiva”, señala el acta.

En una mensaje por videoconferencia, cristina Rivera garza señaló: “Hace unos minutos que me avisaron que mi libro el invencible verano de Liliana se hizo acreedor del Rodolfo Walsh 2022, el galardón más importante de novela de un tema criminal no ficción escrita en español.

“Me enorgullece muchísimo, estoy segura que este premio servirá para darle todavía más amplitud al llamado por la justicia para el feminicidio de Liliana, y también para ampliar la atención sobre uno de los temas más graves de nuestro tiempo, una de las tragedias más inquietantes y terribles de nuestro tiempo, como son los feminicidios. Muchas gracias por la atención literaria, por la atención cultural y social a este tema”.

El libro, que tres décadas después reconstruye la rica e intensa vida de Liliana –hermana de la autora— hasta la fecha que es víctima de feminicidio, el 16 de julio de 1990, fue una de las categorías más competidas al estar entre los finalistas con otras obras como Aquí acaba la patria, de Federico Mastrigionavi; El contragolpe, del periodista Carlos Quílez; La doble muerte de Unamuno, de Manuel Menchón y Luis García Jambrina; y La hermandad de la muerte, de la periodista Cruz Morcillo.

Al dar a conocer el premio, Pablo Batalla, secretario del Jurado del Rodolfo Walsh, destacó que el galardón fue otorgado por unanimidad.

En esta obra, Cristina Rivera inició una búsqueda por justicia para su hermana, asesinada en julio de 1990, y para ello recurrió a todas las cartas y diarios de la propia víctima, que quedaron almacenadas en la casa familiar, a ello añadió testimonios de quienes convivieron con su hermana, incluidos aquellos compañeros de la carrera de Arquitectura.

La autora combina la voz de su hermana con el rescate de memorias y persiste en su exigencia de justicia.

Durante mucho tiempo, Liliana trató de terminar su relación con un novio de la preparatoria que insistía en no terminar la relación. Finalmente, ella tomó la decisión de romper esa relación, buscaría una nueva etapa en su vida, estudiando una maestría y un doctorado, después viajaría al extranjero. Pero esta expareja decidió que ella no tendría una vida sin él.

La autora ha escrito que con este libro “parece que escribo sobre el pasado, pero siempre estoy pensando en el presente”.

Asimismo, el jurado del Premio Dashiell Hammett de la Semana Negra de Gijón anunció este viernes que otorgó el premio de su 35 edición ex aequo a dos novelas, de Nicolás Ferraro, Ambar (Revolver), y la del actor y escritor Carlos Bardem, por El asesino inconformista (Plaza y Janés).

El premio Celsius 2022 se otorgó al libro Con esta Luna, del escritor argentino Marcelo Guerrieri, que aborda una historia alrededor de las tensiones sociales a raíz de la polarización política en Buenos Aires, en el que los protagonistas son los taxistas de la noche en la capital argentina.

El premio Espartaco fue otorgado a la novela Azucre (editorial pepitas de calabaza), escrita por Bibiana Candia, que relata las vicisitudes de 1744 gallegos que fueron llevadoa a Cuba en el año 1853, para trabajar en las plantaciones de caña de azúcar haciendo trabajos forzados.

La autora resaltó que este relato destaca “todas las gestas sostenidas sobre la vida de muchos desgraciados”.

CD/JV