Ene 17, 2022 / 10:07

Lo contaban los políticos de la vieja guardia

Vergara y sus patoaventuras. Esta anécdota la contaban los políticos de la vieja guardia: en los primeros días del mandato, un gobernante atendió en Palacio al padrino de su hijito. “Compadre, pídeme lo que quieras”, a lo que respondió el interpelado: “mira compadre, no quiero ningún cargo, sólo quiero que me saludes en público”.

Lo que el compadre le dio a entender al Tlatoani –según quienes contaron esto- fue que no necesitaba un nombramiento, sino que los demás se dieran cuenta que estaba cerca del poder, y así hacer y deshacer a su antojo: que los demás funcionarios del gabinete se le cuadraran, que nadie le negara un contrato por adquisición de obras o servicios, etc… etc…

CD/YC

Otras: