El creador Daniel Hourdé exhibe 24 obras que evocan los tormentos secretos del alma

Ciudad de México.- El artista Daniel Hourdé (Boulogne-Billancourt, 1947) tiene el deseo extravagante de dibujar nuestros sentimientos y sombras ocultas, evocar los tormentos secretos del alma y transcribirlos a través de sus obras, declaró en entrevista con motivo de su exposición que se inaugura mañana en la Galería Picci Fine Arts.

Durante una caminata por el Bosque de Chapultepec, el creador prestó atención al sonido que producían las hojas arrastradas por el viento, lo que después se convirtió en las voces de los poetas, escritores e intelectuales que, en forma de libros, representados como los frutos de un árbol escultórico, actualmente se exhibe en La Bienal de La Habana. Los reflejos de las hojas de aluminio conforman un follaje que se alza como una metáfora de la libertad de la palabra y de las páginas de valor universal.

El quehacer de Hourdé se describe como el diabólico arte de dar forma a nuestra sombras. Como creador polifacético ha experimentado con distintas disciplinas; inicialmente fue galerista y pintor, más tarde experimentaría con la escultura, el dibujo, el mobiliario y las instalaciones.

En una conversación desde París, menciona que, como decía Ingres –pintor francés del neoclásico–: El dibujo es la base, por eso desarrolló primero esta disciplina. Luego se propuso pasar a una tercera dimensión, de lo plano al volumen, quería que estos dibujos se volvieran reales, que no se vieran únicamente pegados en una pared.

La exposición individual Daniel Hourdé: De París a México mostrará 24 obras, entre carboncillos, esculturas de bronce y mobiliario en las que aborda la fragilidad y la complejidad humana mediante la duplicación y fragmentación del cuerpo, con un arte a la vez trágico y lúdico, informó la galería Picci Fine Arts. Las sombras humanas son reveladas, pero también los reflejos que manifiestan la esperanza con caducidad y desequilibrios a través de espejos.

Recuerda que morirás es el mensaje que dos esqueletos metálicos de tamaño natural, los cuales sostienen un espejo, le comunican al espectador frente a la escultura Oh mon beau miroir, tu es ma croix (Oh, mi hermoso espejo, eres mi cruz, 2013), una de las piezas que se podrán apreciar desde mañana en la exposición individual, la cual aborda la fragilidad y la complejidad humana.

De igual forma, La fête est finie (Se acabó la fiesta, 2013) es un recordatorio de que la vida está acotada a la caducidad orgánica de los cuerpos, con un personaje en huesos que parece levantar la mesa de un banquete.

En 2022 Hourdé presentó su trabajo por primera vez en México con la exposición París-Tenochtitlan en el Museo de la Cancillería. La presencia en la galería Picci Fine Arts prosigue la colaboración con el artista francés que comenzó desde hace más de 20 años y que permitió su presencia en nuestro país.

Lo trágico, cierta alegría y humor

El dibujante y escultor se siente contento de volver exhibir su trabajo en México, pues fue bien recibido. Hay un eco muy favorable, tal vez porque mis preocupaciones se unen a los mismos motivos que se encuentran tanto en la cultura prehispánica, hispánica y contemporánea.

En su visión, expresa, ha abordado el esqueleto en una dimensión que se asocia tanto con lo trágico como con cierta alegría y humor, y en eso, considera, se parece en los mexicanos.

Pichi Aguilar, director de la galería, cuenta que esta segunda exposición que organizan de Daniel Hourdé en México es una selección representativa de la anterior, ya que la galería está en un espacio más pequeño, pero está muy bien curada; es una síntesis en cuanto al dibujo de carboncillo y el arte objeto, además de que hay obra nueva, entre ellas algunas esculturas. Tenemos unos dibujos figurativos de cuerpos muy interesantes y unas obras bellísimas.

La muestra ofrece una nueva oportunidad para apreciar el arte contemporáneo con una propuesta innovadora y de impacto cultural.

La relación de Daniel Hourdé con los hermanos Aguilar, Arturo Pichi y Juan Pablo surgió gracias a su padre, Poncho Aguilar, quien fue un gran coleccionista y quien trabajó en la década de los 60 con el nombre de Galería Ittati, con figuras como Francisco Corzas, Ricardo Martínez y José Luis Cuevas. El mexicano y el francés coincidieron al dedicarse al comercio de arte africano.

Nos conocemos desde muy jovencitos, relata en entrevista el galerista Pichi Aguilar. Con el tiempo hemos tenido esta relación porque somos grandes admiradores de su trabajo y de sus exposiciones importantes.

El trabajo colaborativo entre Hourdé y Picci Fine Artes fructificó recientemente con la presentación de la escultura monumental El árbol de las mil voces, la cual forma parte de la Bienal en La Habana (2024-2025), obra de unos 15 metros de altura que continúa en la Plaza de Armas con el fin de propiciar la reflexión sobre la libertad de expresión, los dogmatismos y las ideas.

Antes, esta obra formó parte del programa de arte público Detrás de los muros, en el Pont du Carrusel, un puente sobre el río Sena, en París.

La exposición de Daniel Hourdé. De París a México permanecerá abierta hasta el 1º de marzo en la galería Picci Fine Arts (Alpes 700A, Lomas de Chapultepec).

Con información de: La Jornada

CD/WM