Sep 22, 2024 / 17:26

La envidia

Sin medias tintas

Claudia Viveros Lorenzo

El Diccionario de la Real Academia dice que la envidia es:” la tristeza o pesar del bien ajeno”. Para algunos esta definición puede parecer un poco frágil, si consideramos las diversas manifestaciones de esta emoción, pues no debemos dejar de considerar que de la tristeza del bien ajeno a la alegría por el mal ajeno solo hay una línea muy fina.Hay muchos sentimientos de envidia, pero todos tienen como piedra angular el sentimiento de inferioridad, la envidia no puede ser entendida sin considerar las sensaciones de precariedad narcisista y las vicisitudes de las pulsiones de la infancia, dentro del seno familiar, las diversas modalidades de envidia no son sino un eco de los sentimientos de inferioridad y rivalidad sufridos por el niño en su desarrollo psicológico, con padres, hermanos y otras figuras importantes. La envidia instaurada en el carácter del adulto, es por lo regular el reflejo de las experiencias de pequeñez y desvalimiento de la infancia.Las manifestaciones de la envidia nos dicen siempre más de los sentimientos de inseguridad del envidioso que de la personalidad del envidiado.

Esta emoción es maladaptativa porque hecha a perder o anula el placer de la admiración, el gozo de ser buen amigo, la utilidad del compañerismo y la solidaridad.

La forma más conflictiva de la envidia es aquella que va directo a las personas que se amam.Aquí el inconsciente juega un papel crucial que destruye aquello que valoramos de nosotros mismos e inyecta a la consciencia de una atormentadora culpa. Sentir envidia es sufrir. Además de dolor, la envidia provoca en quien la siente ansiedad, hostilidad, rabia y depresión. Y toma diferentes formas. En la etapa escolar, pueden ser las notas; en la adolescencia, las conquistas amorosas; en la adultez, el éxito material, laboral o familiar.

La mente humana tiene que recurrir a diversos mecanismos de defensa inconscientes, para restaurar la autoestima lesionada en las comparaciones envidiosas y equilibrar así la homeostasis narcisista. Estos mecanismos pueden ser más o menos adaptativos. Llamamos patológicos a aquellos patentemente mala-daptativos. Un caso extremo de éstos puede ser el de los individuos que cometen actos "grandiosos" de terrorismo o el de aquéllos que atentan contra celebridades admiradas/envidiadas. ¿Qué pasa si la envidia no se controla adecuadamente? “En la envidia destructiva, la persona ve al otro como un obstáculo. Si esa envidia sigue creciendo puede planificar cualquier cosa, incluso, la muerte. Esto, dependiendo de la estructura de personalidad. La envidia no encuentra nunca su catarsis. Una vez que prende en el ánimo, lo roe y lo devora.

La envidia patológica es típica en estructuras de personalidad narcisista y también en los psicópatas. Los envidiosos patológicos se sienten súper amenazados y angustiados por el éxito, la felicidad o la prosperidad de otros, porque sienten que no pueden tener eso. Entonces, si no lo tienen, lo destruyen”.

Es común que un sujeto sienta envidia, en alguna de sus numerosas manifestaciones, hacia alguien y, simultáneamente, profese adoración acrítica hacia otra persona. Se trata de las dos caras de una misma moneda.

Es importante integrar la idea de que los aspectos que no te gustan de ti, no te definen y por supuesto no te invalidan, puedes intentar cambiarlos o mejorarlos si te generan malestar, aun así, siempre vamos a tener limitaciones o carencias, pero también tenemos capacidades y competencias.

Algunas recomendaciones que pueden facilitar este proceso:

• Redefine: ¿qué coyuntura, atributo o actitud te está indicando la envidia que tienes que cambiar de ti mismo? Trabaja en ello a nivel emocional.
• Busca el origen: ¿qué es lo que realmente activa tu envidia? A veces polarizamos nuestra envidia hacia algo, cuando en realidad lo que más deseamos es otra cosa de esa persona, que no nos permitimos sentir.
• Encuentra patrones: ¿has sentido algo similar en otras situaciones? ¿Cuál es el denominador común?
• Cambia el signo de tu emoción: transforma la envidia en admiración.
• Aprende a disfrutar de lo que tienes: no vivas en futuribles hipotéticos o remotos de lo que pasaría si tuvieras lo que envidias.
• Relativiza: nadie representa la perfección completa. ¿Qué cosas tienes tú que no tiene la persona a la que envidias? ¿Qué crees que la otra persona envidiaría de ti y cómo crees que manejaría esta carencia?
• Reajusta tus creencias: muchas veces pensamos “si yo tuviera lo que tiene X, sería feliz”, pero no es así. Esa cualidad seguramente no será la clave de la felicidad para el envidiado y por tanto tampoco sería la tuya. Es mucho más importante valorar lo que uno tiene más que lo que no se tiene.
• No te tortures: recuerda que la envidia es una emoción normal y universal, igual que tantas otras, y es esperable tenerla. A lo largo de la vida todos envidiaremos y seremos envidiados de una forma u otra.

Comentarios: draclaudiaviveroslorenzo@gmail.com
Sígame en mis redes:
Facebook: Claudia Viveros Lorenzo
X: @clauss77
Linkendl: Claudia Viveros Lorenzo.

CD/JV

* Las opiniones y puntos de vista expresadas son responsabilidad exclusiva del autor y no necesariamente reflejan la línea editorial de Cambio Digital.

Otras Columnas:

Nov 17, 2024 / 14:30

Marilyn Cote y la vulnerabilidad del sistema de salud mental en México

Nov 10, 2024 / 13:02

Egotismo: El Reflejo Narcisista que Fragmenta Nuestra Realidad

Nov 03, 2024 / 14:57

Cazzu, Angela y Nodal

Oct 27, 2024 / 15:44

México y Perú: ¿Un Diálogo Diplomático Roto?

Oct 20, 2024 / 16:18

El Rey emérito Juan Carlos y los escándalos

Oct 13, 2024 / 13:41

Los Claroscuros de Nayib Bukele: Entre la Modernización y la Autocracia

Oct 06, 2024 / 13:29

La primera semana de Sheinbaum: ¿Nuevo estilo o continuidad?

Sep 29, 2024 / 13:32

Las disculpas no se exigen

Sep 08, 2024 / 09:03

La casa de los Famosos

Ago 25, 2024 / 22:22

El feminismo oculto de Beatriz

Ago 18, 2024 / 16:36

Ser sustentable

Ago 12, 2024 / 20:52

Trad wife

Ago 11, 2024 / 16:59

La Inteligencia artificial

Ago 04, 2024 / 15:11

Maduro y la democracia venezolana.

Jul 28, 2024 / 16:17

La cosificación normalizada

Jul 22, 2024 / 09:56

¿Y el huipil de Xóchitl?

Jul 17, 2024 / 16:39

Le disparan a Trump y quizá lo disparan a la presidencia

Jul 08, 2024 / 10:08

El carnaval veracruzano en verano

Jun 30, 2024 / 18:39

La inteligencia artificial

Jun 23, 2024 / 23:31

Extrañar

Jun 16, 2024 / 13:36

Nodal y sus víctimas

Jun 10, 2024 / 09:21

Teléfono celular: Descarado ladrón

Jun 02, 2024 / 19:34

2050

May 26, 2024 / 16:50

El insoportable calor.

May 19, 2024 / 16:29

La cultura de la disculpa

May 12, 2024 / 15:28

El descanso

Abr 21, 2024 / 22:14

Estrés hídrico

Abr 15, 2024 / 00:26

El dolor

Abr 07, 2024 / 15:58

La violencia económica

Mar 31, 2024 / 13:22

La paciencia

Mar 22, 2024 / 23:58

Kate tiene cáncer

Mar 18, 2024 / 10:39

El destino

Mar 09, 2024 / 17:52

Desaprender

Mar 03, 2024 / 13:11

El amor propio

Feb 26, 2024 / 09:22

La gente no se va

Feb 18, 2024 / 18:17

La mentira

Feb 04, 2024 / 16:21

Benito:

Ene 28, 2024 / 20:53

Enamorada de los baches

Ene 22, 2024 / 09:11

Héroe nacional

Ene 15, 2024 / 22:42

La sociedad de la nieve

Ene 08, 2024 / 08:05

Renacer

Dic 19, 2023 / 12:14

Las habilidades del siglo XXI

Nov 26, 2023 / 14:26

El odio desde el anonimato

Nov 19, 2023 / 21:26

Vergüenzas

Nov 12, 2023 / 22:43

El saludo

Nov 05, 2023 / 23:05

Andrés entre su ceguera y su sordera

Oct 23, 2023 / 00:48

El error favorito

Oct 16, 2023 / 10:54

El cuidado de la salud mental del docente

Oct 08, 2023 / 17:35

El tiempo ya no es un valor

Sep 25, 2023 / 08:54

Zombieland

Sep 18, 2023 / 08:43

El despecho de Ebrard

Sep 11, 2023 / 11:23

"Todo por amor, nada por la fuerza"

Sep 03, 2023 / 12:56

Los presupuestos son el reflejo de las prioridades de un gobierno

Ago 20, 2023 / 20:42

Una mujer presidenta para México

Ago 13, 2023 / 13:21

El callejón de los trancazos

Ago 07, 2023 / 23:10

El drama de los libros de texto

Jul 31, 2023 / 08:00

La miseria del malo

Jul 23, 2023 / 18:42

Claudia o Xóchitl

Jul 16, 2023 / 21:12

Ser o tener

Jul 09, 2023 / 14:53

La intuición

Jun 25, 2023 / 14:32

El Stealthing de Tenoch

Jun 18, 2023 / 13:25

Insatisfacción permanente

Jun 11, 2023 / 15:25

Trevi & Menéndez

Jun 04, 2023 / 17:05

Scooby

May 28, 2023 / 20:17

100 años

May 21, 2023 / 16:29

¿Quién te ha hecho tanto daño Ana?

May 14, 2023 / 15:42

Los problemas se arreglan en casa propia no en la del vecino

Abr 30, 2023 / 17:26

Nuestra evolución cerebral

Abr 23, 2023 / 20:54

Lea que no se arrepentirá.

Abr 16, 2023 / 12:57

La Crisis del Dalai “Lame”

Abr 09, 2023 / 15:05

Gestación subrogada

Abr 02, 2023 / 14:20

IA vs IN

Mar 26, 2023 / 11:14

Teléfono celular, descarado ladrón.

Mar 19, 2023 / 16:09

Norma Lizbeth

Mar 12, 2023 / 16:08

8M

Feb 26, 2023 / 15:54

Resignificar

Feb 05, 2023 / 14:31

Blogueros cubanos de realidades solo imaginadas

Ene 29, 2023 / 20:38

El abuso de Sezane

Ene 22, 2023 / 16:37

Transfeminicidio

Ene 14, 2023 / 21:07

BZRP Music Sesión #53 un fenómeno social

Ene 08, 2023 / 23:10

Ovidio

Ene 02, 2023 / 23:34

El fin del escribidor y la reyna de la prensa rosa.

Dic 25, 2022 / 14:50

El ejercicio de Sororidad de Yeri Mua

Dic 18, 2022 / 18:14

Andrés y Pedro

Dic 11, 2022 / 17:00

El segundo de la vida.

Dic 04, 2022 / 17:34

Desaparecidos

Nov 28, 2022 / 07:50

Dar sin esperar

Nov 20, 2022 / 15:02

Tenoch el Prieto

Nov 13, 2022 / 17:19

Favor con favor se paga

Oct 30, 2022 / 16:23

La verdadera inclusión

Oct 09, 2022 / 15:31

Autoreconocimiento

Sep 26, 2022 / 08:10

Baches y más baches

Sep 17, 2022 / 22:49

Tamales neoliberales

Sep 10, 2022 / 20:37

Muere Isabel II, se termina una era

Sep 03, 2022 / 15:07

La tesis no es un trámite

Ago 28, 2022 / 16:02

Dejar de romantizar

Ago 21, 2022 / 12:40

Ikigai

Ago 07, 2022 / 22:36

Solo lo barato puede comprarse con dinero

Jul 31, 2022 / 15:23

Llorar como proceso sanador.

Jul 25, 2022 / 08:35

Títulos y grados como barajitas

Jul 17, 2022 / 15:49

Escuchar para entender, no para responder

Jul 10, 2022 / 16:17

Vivir de apariencia

Jul 03, 2022 / 11:48

51

Jun 25, 2022 / 13:39

Yrma Lydia

Jun 19, 2022 / 15:23

Gordofobia

Jun 11, 2022 / 22:24

Envejecer con dignidad

Jun 04, 2022 / 22:04

Shakira codependiente

May 29, 2022 / 12:17

Entre el ghosting y el gaslighting

May 21, 2022 / 18:19

Netiqueta

May 15, 2022 / 16:44

Micromachismos

May 09, 2022 / 08:53

¿Quién ayuda a los que ayudan?

Abr 30, 2022 / 20:22

Johnny y Debanhi

Abr 24, 2022 / 16:14

Poderosa

Abr 19, 2022 / 20:33

Reprimir aleja de la solución

Abr 12, 2022 / 22:24

Aceptar al otro

Abr 03, 2022 / 16:53

De cachetadas y límites.

Mar 29, 2022 / 15:00

Sobrecalificada

Mar 12, 2022 / 20:49

Escribir es un arte

Mar 06, 2022 / 21:17

El abrazo

Feb 28, 2022 / 17:16

Vladimir y Volodímir, en la búsqueda de un diálogo urgente.

Feb 20, 2022 / 13:57

Háblese bonito

Feb 13, 2022 / 22:51

Los boletos para Bad Bunny

Feb 07, 2022 / 18:50

No haces nada

Ene 30, 2022 / 15:47

Salvador y Agustín

Ene 24, 2022 / 19:46

Adopciones exprés y exhumaciones

Ene 17, 2022 / 12:44

Donald regresando a las andadas

Ene 09, 2022 / 19:32

Infidelidades y doble moral patriarcal

Ene 02, 2022 / 17:39

Retos 2022

Dic 26, 2021 / 20:16

Todo está por las nubes

Dic 19, 2021 / 10:44

Visa mexicana

Dic 12, 2021 / 13:31

La culpa y la co responsabilidad

Dic 05, 2021 / 17:35

De Yosstop a Galilea

Nov 28, 2021 / 22:00

Veracruz inundado

Nov 21, 2021 / 15:33

La llegada de Meta

Nov 15, 2021 / 08:37

Redes de colaboración humana y creatividad

Nov 07, 2021 / 13:56

Los ricos y la hambruna mundial

Nov 01, 2021 / 10:58

El amor ágape

Oct 25, 2021 / 10:10

Ciudadanos del mundo

Oct 18, 2021 / 12:57

El síndrome de la resignación

Oct 10, 2021 / 13:30

7 horas de libertad

Oct 03, 2021 / 14:03

Los recuerdos nos construyen

Sep 26, 2021 / 12:55

El miedo

Sep 19, 2021 / 15:20

Entre la propuesta seria y la cosificación de ésta

Jun 28, 2021 / 17:12

Orgullo y Respeto

Mar 29, 2021 / 23:11

El retorno a lo presencial