¿Has probado la posición sexual pretzel? Se trata de una opción perfecta para parejas que buscan romper con la rutina y quieren llevar los encuentros bajo las sábanas a otro nivel. Está inspirada en la forma del famoso pan alemán del mismo nombre y seguro que te encantará.

El pretzel es una posición sexual que parece complicada, pero en realidad es muy sencilla y es perfecta para los que empiezan a atreverse a algo distinto en la intimidad.

Hay dos variantes para disfrutarla y en los siguientes párrafos te decimos cómo ponerla en práctica paso a paso. Toma nota.

Posición sexual pretzel

Una vida sexual monótona puede derivar en aburrimiento por parte de uno o de ambos, una sensación de incompletitud, frustración o llevar al fracaso la relación. Por ello, es importante probar nuevas cosas, como posiciones sexuales.

En ese sentido, información de 20 minutos señala que la posición sexual pretzel es una buena opción y lo mejor es que se puede imitar en la alcoba con la pareja sin ningún problema. Existen dos formas de hacerla.

Pretzel clásico

En primer lugar, tenemos el pretzel clásico, que se hace de la siguiente manera:

• La mujer se tumba sobre la cama o una superficie firme, medio de lado.
• Debe pasar una pierna por encima de su pareja, que estará de rodillas frente a ella.
• Una pierna de ella queda rodeando la cintura de su pareja, mientras la otra queda entre las piernas de su amado.
• Ambos deben moverse al mismo ritmo y disfrutar del contacto visual.

Pretzel más intenso 

Otra variante de la posición sexual pretzel para parejas más atrevidas, consiste en lo siguiente:

• La mujer se coloca boca arriba y estira las piernas hacia arriba y luego un poco hacia atrás.
• Su pareja se coloca de rodillas frente a ella, recargando sus brazos sobre la cama como en posición de misionero.
• Ella debe colocar las piernas sobre los hombros de su pareja y disfrutar de los movimientos.

¿Por qué debes hacer la posición sexual pretzel?

Cualquiera de las variantes de la posición sexual pretzel se disfruta al máximo y de hecho, hay 5 razones por las que deberías intentarla al menos una vez:

1. Se logra una penetración profunda, por lo que, si se disfruta de este tipo de intensidad, esta postura llega hasta el fondo.

2. Las sensaciones son intensas para ambos, debido al roce de zonas erógenas que permite la postura. Además, se puede explorar un nuevo ángulo de penetración que los excitará al máximo.

3. Es cómoda para ambos y si la mujer se cansa, la pareja puede sostener sus piernas sin ningún problema para alargar el placer.

4. Es ideal para principiantes, pues no requiere una flexibilidad avanzada ni de estar colocado en una pose complicada o incómoda.

5. Es posible mirar a los ojos a la pareja durante el encuentro sexual, lo que puede ser muy romántico y favorecer la conexión.

Ya lo sabes, si quieres una estimulación sexual intensa para ti y tu pareja puedes probar la posición sexual pretzel que garantiza el placer, incrementa la intimidad y la complicidad entre ambos, pues están frente a frente disfrutando del momento.

Con información de: SuMedico.com

CD/YC